Descubre estas ermitas el 13 de junio y el 24 de agosto para impregnarte de la magia festiva en los días en que se engalanan para recibir a sus fieles.

La ermita de San Antonio, de estilo barroco, es un edificio de forma cuadrangular en el que la entrada está custodiada por dos columnas. En su interior, donde predomina la sencillez, se encuentra una imagen del santo. Muy próximo a esta construcción, en el antiguo Camino Real, podrás ver un puente construido en el año 1792. Las fiestas homónimas tienen lugar el 13 de junio.

La ermita de San Bartolomé, también de estilo barroco, se encuentra en las afueras de la localidad. En ella tienen lugar parte de las fiestas celebradas en honor al santo patrón de la localidad el 24 de agosto.